Principales índices
 
Dow Jones  34,879.38  -151.6   -0.43%
S&P 500     4,493.28    -20.7     -0.46%
Nasdaq         15,248.3    -38.4    -0.25%
VIX                      18.8     +0.84    +4.68%
DXY               92.52      -0.12       -0.13%
Oil WTI            67.91       -1.39     -2.01%
Gold            1,796.05     +2.55    +0.14%
U.S. 10Y       1.30            -4pb
 
El Down Jones cayó más de 150 puntos y el S&P 500 bajó un 0,5% el jueves, extendiendo las pérdidas por cuarto día, ya que los inversores siguen siendo cautelosos sobre una economía en desaceleración a medida que la variante delta del coronavirus se propaga y persisten las incertidumbres sobre el cronograma para la reducción de compra de activos de la Fed. Ocho de los 11 sectores del S&P 500 terminaron en territorio negativo, liderados a la baja por los sectores inmobiliario (-2,1%) y sanitario (-1,2%) con pérdidas superiores al 1,0%. Los sectores financiero (+0,3%), energía (+0,1%) y materiales (+0,1%) se opusieron a la tendencia negativa con ganancias modestas.
 
Dentro de las noticas más relevantes que mencionamos de mañana se encuentran una mejora continua en las peticiones semanas de desempleo y el anuncio del BCE de que las compras de activos de emergencia podrían reducirse a un ritmo moderado. La reacción inmediata en las bolsas fue positiva y fue recién en las últimas horas de la sesión que se profundizaron las pérdidas.
 
El sector de energía rebotó después de tres días de venta a pesar de la caída en el precio del petróleo. El sector cayó ayer por debajo de su media móvil de 200 días, pero el avance de hoy lo ha elevado de nuevo por encima de ese nivel. Los futuros del crudo WTI no lograron recuperarse el jueves y cayeron un 2% a menos de 68 dólares por barril presionados por la administración de reservas estatales de China diciendo que liberaría reservas de petróleo crudo al mercado para estabilizar la oferta y la demanda del mercado interno y garantizar la seguridad energética. Además, las preocupaciones sobre el débil consumo de petróleo en Asia debido al aumento de los casos de la cepa Delta persistieron, y Japón se preparó para extender las restricciones de emergencia de COVID-19 en Tokio y otras regiones hasta fines de este mes. Mientras tanto, ayer la EIA redujo su proyección de crecimiento de la demanda mundial de petróleo para 2021 y dejó pocos cambios en su pronóstico para 2022.
 
Biogen (BIIB 300.15, -21.40, -6.7%) dijo que su tratamiento para el Alzheimer está experimentando un lanzamiento más lento de lo previsto inicialmente. Moderna (MRNA 455.92, +33.02, +7.8%) anunció avances significativos en toda su cartera de proyectos.
 
Además, las acciones chinas que cotizan en los Estados Unidos, incluidas Alibaba y NetEase, sufrieron nuevas caídas, a medida que China intensificó una ofensiva regulatoria contra los juegos en línea.
 
Las acciones europeas cerraron mixtas al final de una sesión volátil el jueves, con el DAX 30 avanzando un 0,1% después de cerrar el miércoles en un mínimo de más de un mes, y el CAC 40 de París y el FTSE MIB de Milán ganando un 0,2%. Mientras, el FTSE 100 de Londres y Madrid perdieron un 1% y un 0,4%, respectivamente. El Banco Central Europeo anunció que compraría menos bonos para el resto del año, pero no dio señales de su próximo movimiento de política, incluida la forma en que podría desmantelar el Programa de Compras de Emergencia Pandémica (PEPP) de 1,85 billones de euros. Además, el banco central elevó sus previsiones de crecimiento e inflación para este año.
 
En Brasil, tanto el el índice Bovespa como el real cerraron al alza luego de subir fuertemente en la última media hora después de que el presidente Jair Bolsonaro bajara el tono de unas declaraciones previas al afirmar que respetaba las instituciones de la República. Antes del comunicado la bolsa estaba sufriendo nuevas caídas tras las pérdidas de 4% en la sesión anterior, reflejando las preocupaciones de los inversores sobre la agenda económica del país en medio de las crecientes tensiones político-institucionales. Al mismo tiempo, los camioneros brasileños decidieron bloquear varias carreteras en al menos quince estados en señal de protesta, así como en apoyo al presidente Jair Bolsonaro después de los discursos del martes durante las celebraciones del Día de la Independencia. Mientras tanto, la tasa de inflación anual de Brasil se aceleró a 9,68% en agosto, la más alta desde febrero de 2016, lo que aumenta las expectativas de un mayor endurecimiento de la política monetaria.